El Palacete do Caminho Novo en São Cristóvão, Río de Janeiro, es un raro ejemplar arquitectónico del siglo XIX, y es uno de los primeros edificios catalogados como patrimonio histórico y artístico nacional por el Instituto Brasileño de Patrimonio Histórico y Artístico Nacional. (IPHAN) en 1938. Diseñado por Jean Pierre Pézerat, arquitecto del Emperador, está adornado con pinturas decorativas de Francisco Pedro do Amaral y estucos de los hermanos Ferrez. El edificio una vez albergó el Museo del Primer Reinado y actualmente alberga el Museo de la Moda Brasileña.
El Palacio fue un regalo del Emperador Don Pedro I a Domitila de Castro Canto e Melo, la Marquesa de Santos, en 1826, y ella vivió allí hasta 1829.
Años más tarde, en 1857, el banquero e industrial Irineu Evangelista de Sousa, Barón de Mauá, en ese momento el hombre más rico de Brasil, recibió como regalo el antiguo palacio de la Marquesa de Santos en el barrio imperial de São Cristóvão para instalar una deuda. Era conocido como el Palacete do Caminho Novo.
El Palacete era una de las casas más envidiadas de la ciudad de Rio de Janeiro. Además de su esposa (que también era su sobrina) y sus seis hijos, también vivían en el palacio la madre de Mauá, doña Mariana Batista de Carvalho, y su hermana, Guilhermina de Souza Machado. Mientras que a doña María le gustaba vivir cerca del emperador y estaba interesada en la etiqueta, su hermana era una viuda triste a la que no le gustaba el ajetreo y el bullicio del palacio y la atención que atraía.
Guilhermina prefirió una vida más tranquila y discreta, considerando trivial la atención de su madre a la ropa y los carruajes de quienes visitaban la corte, lo que provocó numerosas desavenencias y disputas entre ellas, argumentos en los que medió la sobrina y esposa del barón, María Joaquina. . Vivían todos juntos: la madre, la hermana, la esposa y los seis hijos del barón. Apasionado de su trabajo y de su familia, el Barón dedicaba muchas de sus noches al trabajo en su oficina. Muy organizado y hasta sistemático, mantuvo una rutina en sus días y siempre se mantuvo al tanto de las noticias mundiales.
Mauá tenía los recursos para hacer su casa en São Cristóvão aún más grande y lujosa que el Palacio Imperial de Dom Pedro II, su vecino, pero optó por hacer pequeñas remodelaciones, como la fachada y el piso de la sala de música. También añadió una planta más al Palacete y repintó gran parte de la decoración interior.
Mauá residió allí hasta 1882, cuando, el 22 de abril, vendió la casa al barón de Guararema, Luís José de Sousa Breves, tras su ruina económica.
Referencia: CALDEIRA, Jorge. Mauá: empresário do império. Brasil: Companhia das Letras, 1995.
Matheus Araújo
Matheus es empresario de Araujo Media, donde se desempeña como CEO y Director Creativo. Comparte análisis en su blog personal "blog.matheusaraujo.me" y actualmente cursa la carrera de Publicidad y Propaganda. Además, es un apasionado de la historia, en particular de la de Brasil, lo que lo llevó a convertirse en el fundador y editor del portal Brazilian History.
